martes, enero 30, 2007

Cabecita negra no mide IV

Algo de lo que quedó. Edito a piacere, no puedo poner a todos:
  • María Esperanza: "Lejos de mí negar la problemática de la raza en general, y el racismo argentino en particular. Sólo quería alertar, sin embargo, sobre las deficiencias en la manera en que el Banco Mundial ha tratado y trata estas cuestiones. El Banco Mundial es sabido que inventa y luego 'vende' problemáticas que responden a las prioridades y las modas de sus propias agendas. Desde hace dos o tres años, el tema estrella es la negritud en Latinoamérica (la negritud, no la etnía en general). El problema no sería éste, ya que el tema racial es importante, sino a) la idea de que el problema es el mismo en todos los países de la región, ya sea, por dar un ejemplo, Ecuador, Brasil, Argentina o República Dominicana y b) que el marco de referencia para resolver el tema de la raza es el multiculturalismo a la norteamericana. Estos estudios hacen dos cosas: la primera es asumir que todo racismo opera igual que el racismo blanco americano y, más grave, niegan la OTRA gran condición de Latinoamérica, que es el mestizaje. Latinoamérica es racista, quien lo duda, pero también es innegablemente mestiza, lo que no es EEUU. Me parece que la salida al racismo no pasa, aquí, por reivindicar el multiculturalismo como coexistencia de etnías sin mezcla, sino justamente reivindicar 500 años de mezcla y mestizaje".
  • Liberal de izquierda: "... también podemos darnos una vuelta por las cárceles y ver cuántos rubios blanquitos encontramos. Yo creo que pocos. Y creo que sí, que la clase media vernácula continúa con esa idea loca de que los argentinos 'descendemos de los barcos', somos la Europa del sur y tanto más".
  • Ana C.: "Mire, la integración de gente de distintas 'etnias' (seamos políticamente correctos o, quizás, solamente correctos) no es fácil en ninguna de las sociedades que yo conozco de verdad o por leer sobre ellas. Argentina, en realidad y pese a todo, es uno de los mejores ejemplos que a mí se me ocurren. El día que en Argentina disminuya la pobreza, por la razón que sea, se va a ver que todos somos mestizos. La prueba final, de todas formas, será en la cancha de Boca".
  • Anónimo: "Veamos entonces varios de los sesgos de la pobreza:
    -la pobreza tienen un sesgo de género del cual nunca hemos hablado en este post (a hacerse cargo, viejo)
    - la pobreza tiene un sesgo de 'socialidad'. La gente es más pobre cuando más sola está en el mundo (familia, amigos, etc....) y vice versa.
    - la identidad entre pobreza y morochaje es bastante cuestionable. Alcanza con ver un poco más algunos cruces acerca de la composición social de la pobreza de Capital (el distrito menos pobre y menos morocho del país) para ver que no hay tal 'nicho'.
    - Cuando hablamos de la pobreza de fin de siglo, estamos hablando de algo bastante distinto de la pobreza de mediados de siglo".
  • Ceci: "En lo que no hay duda es que el ideal de belleza(que es 100% cultural) esta identificado con un determninado biotipo racial. ahora que los matrimonios no estan más arreglados, es indudable que tanto la gente 'linda' como la gente 'rica' sean objetivos deseables, y tengan más posibilidades de aparearse. Por eso el patriciado argentino, antaño mestizo, se ha ido aclarando. Por eso esta generación de la nobleza europea es mucho más linda que la anterior, cuando no valía casarse con una plebeya/o, aunque fuera hermoso/a. Si Grace Kelli hubiese sido fea, no se habría casado con rainiero. Por eso los hijos del Prícipe Carlos son mucho más lindos que el padre o la abuela, que es un loro barranquero".
  • Ulschmidt: "El planteo racista (el planteo racista-justiciero, digo) te lleva al abismo siempre. Esto tiene una sóla y única utilidad: promover la automarginación de un grupo social, o consolidar, cristalizar la marginación que ya tenga, convertirla en un valor, sacralizarla e imponer que hay una sóla representación política para ese subgrupo (sólo Pochito, sólo Chávez, sólo Evo) te ayudan y te ayudan EN CONTRA del resto de la sociedad, nunca junto. El caso más trágico es Bolivia - y nos faltan ver tragedias en Bolivia, ya estan viniendo".
  • Avallay: "Coincido en parte. Ojo hagamos una mirada por América Latina y esto es un paraiso. Pensemos: Todos los presidentes de 1983 para acá provienen de sectores medios (tal vez De La Rua, que pretendio ser de la oligarquía), uno que manejaba caminones, el bañero, u abogado e Chascomus otro de Río Gallegos ¿Se imaginana eso en los "modelos" de Chile o Uruguay? Acá un metizo manda a la mierda a un tipo que maneja un Mercedes y saludos para la hermana. En el resto de AL solo por ser rubio te tratan de Sr. y a distancia. No las cosas acá no están tan mal, con todo lo que falta. Y en eso el ámbito académico y jurídico está mucho mas atrasado que el político".
  • Erik: "es cierto, si no salen como en Bolivia, es mas facil para las empresas trasnacionales seguir succionando via canaleta las riquezas bolivianas. No es solo el Pochito, solo Chavez o sólo Evo, ellos solo son los representantes circunstanciales de esas masas o de esos anhelos de justicia social. Ellos se expresan a través de estos. Creer que esta presencia no implica conflictos es no entender la política. En la sociedad misma late el conflicto, pretender esconderlo se lo dejamos a los escribas del status quo. Y esta irrupción, digo la de los cabecitas, la de los aymaras, la de los indígeneas, se realiza de esa forma, muchas veces violenta, pero esto tiene que ver con la resistencia que opongan desde el otro lado.
    Por más que no hablemos de cabecitas, por más que el concepto lo querramos tapar desde nuestra condición culpojena clasemediera, los sujetos existen, algunos no comen, algunos votan por comida, etc. No creo que sea discriminar pensar desde un grupo social (si no releamos un toque a Laclau), y desde sus reivindicaciones históricas".

14 comentarios:

Ulschmidt dijo...

Adhiero a María Esperanza: 500 de años de mestizaje te obligan a hacer algo mucho más inteligente que la "discriminación positiva". Eso sería retroceder un abismo, dejémoslo para los que estan saliendo del apartheid.

Ana C. dijo...

Yo hasta me animaría a decir que hacer "discriminación positiva" después de 500 años de mestizaje es imposible. Si se hiciera, todos tendríamos el derecho a ser discriminados positivamente y la medida no tendría ningún sentido.

La única salida inteligente que yo le veo al asunto es educar al soberano y repartir la torta. Pero eso lleva por lo menos 50 años más, a este paso.

Ana C. dijo...

Y otra cosa que me llama la atención. ¿Por qué todo el mundo parte del supuesto que los mestizos y los morochos son feos? Eso es la imagen que, desgraciadamente, muchos argentinos tienen en la cabeza. En Argentina un flor de morocho sale de levante con un rubiecito tonto y seguro que el rubiecito tiene más éxito, sólo por la tilinguería reinante, no porque se lo merezca.

(Cámbiese el género del morocho y el rubio a discreción, s.v.p.)

Nicolás Tereschuk (Escriba) dijo...

Respeto pero no comparto. Se están quedando con lo último -muy bueno- de María pero no recuperan otras cosas del debate. Ej. no se dice nada de la nota de Susana Torrado y de otros comments. Insisto en que no se puede decir que no hay nada que hacer porque la discriminación positiva sea difícil de implementar.
Quizás los partidos políticos deban discriminar positivamente y en lugar de darle lugar a los de siempre priorizar a dirigentes de base que estén en contacto con gente real de colores reales, digamos, no lo sé.
Saludos

Anónimo dijo...

Ana, eso hay que preguntárselo tambien a los que hacen los castings para las publicidades de Tv, los productores generales de medios audiovisuales, etc .etc. etc....
Fijesé nomás en los tipos "promedio", cuya morocheidad es más legítima: no deben ser pelados, no deben ser babudos. Si, en cambio, pueden disimular la panza con el jetra, cosa que no pueden hacer las chicas. Pero bajo ningún concepto pueden medir menos de 1,7 de altura.
La presión social es muy fuerte para todos y en todos lados, porque a todos les falta algo, y nadie está libre de nada...
(se lo dice uno que, cuando le dijeron "lindo", fue siempre con la luz apagada...)
El día en que las políticas discriminatorias empiecen EN SERIO a tener en cuenta todos estos factores, más de uno se va a encontrar con alguna sorpresa resepcto de cuáles son los estigmas que realmente pesan entre nosotros. Sin ir más lejos, prendan la TV y van a ver que hoy es peor ser GORDO que ser morocho... (y qué casualidad, mientras hay una obesidad de los sectores medios con labores sedentarias, lo que más vemos en Argentina es esa obesidad de "canasta familiar" y "tercera marca").
Veremos cómo sigue esto, porque -aunque todavía no llegó- cada vez estoy más convencido que lo del "morochaje" está yendo camino al de museo!!!

manolo dijo...

Escriba
El comentario de Ana sobre el morocho y el rubio me recordó una charla con una amiga durante el mundial.
Teves como prototipo de cabecita cuasi lumpen tenía un atractivo sexual, no solo por el físico sino también por el aura de peligrosidad que representa su fenotipo.
El temor de las clases medias, blancas o mestizas, no es solamente físico como en los últimos 10 años.
Es el miedo a ser desplazados de un lugar que consideran propio, sea laboral, educativo o de esparcimiento.
No me extraña la coincidencia de MEC y U en este tema, ambos son partidarios de la eficiencia social a nivel general y no focalizado.
Todos los establecimientos educativos deberían alcanzar el nivel del Nacional Buenos Aires.
Lo que sucede es que la discriminación positiva por porcentajes es una maniobra defensiva de los grupos sociales dominantes.
Es una forma de cooptar a los posibles líderes de los grupos discriminados para integrarlos a la elite.
Esto tiene dos efectos, en los grupos discriminados se pierde capacidad organizativa y por lo tanto en nivel de conflictividad queda a nivel policial.
En la clase media se genera un resentimiento por la perdida de lugares que consideran su coto exclusivo de asenso social.
¿Por qué ese negro, indio, mina, puto o pobre va a ocupar mi lugar si yo pase toda mi vida estudiando para que me toque?
Mis antecedentes académicos y laborales son superiores, mi conducta social y forma de vestir son las adecuadas.
Pero eligen a esa catinga solo porque es la más inteligente y joven de su grupo de origen.
Ulschmidt , señalaba los ejemplos discriminación positiva a USA y la India.
En esos países los grupos sumergidos tienen representantes que coinciden en la mayoría de los temas con la elite gobernante, parafraseando a Perón son los delegados del poder ante las masas.
También tenemos una radicalización de los sectores medios en rechazo al poder central al sentirse excluidos del lugar que les corresponde por la gracia de Dios o porque así deben ser las cosas.
En cuanto a Evo et al, la opción del poder es mantener la alianza con los sectores medios, por eso la resistencia ante el cambio es mas masiva que lo esperado.
En la Argentina de los 40 a los 70, la resistencia de los sectores desplazados utilizo lo racial y lo étnico como método de descalificación.
Los descalificados lo tomaron como identificación positiva, al igual que los hinchas de fútbol, cabeza, grasa, groncho, negro, son equivalentes a bostero o gallina.
En ese conflicto se dieron paradojas, la mas notable el enfrentamiento entre Gatica y Prada.
La historia de Gatica la conocemos todos, pero Prada es la mas interesante.
Chico pobre con poliomielitis, en base a esfuerzo y sacrificio no solo se recupero físicamente sino se convirtió en un atleta de alto nivel.
Una historia digna del Readers, ejemplo de superación para la clase media.
Era el abanderado de los contras, el único problema radicaba en ser peronista fanático.
Reconocía que el ídolo popular era el Mono, por el odio de clase que generaba.
Un abrazo

Nicolás Tereschuk (Escriba) dijo...

Entiendo, Manolo, pero no planteo la "discriminación positiva por porcentajes" como "maniobra defensiva de los grupos sociales dominantes". Creo.
Planteo que aquí, la desestructuración social ha pegado parejo pero hay sectores que sufren más. Y que -no tengo datos- pero hay algunos de esos -muchos- que físicamente son de determinado modo.
Dicho por la -no nazi por cierto- Dra. Susana Torrado, los rostros de los pobres son criollos.
Y ahí está la otra discusión: claro que queremos políticas universales, pero ¿y mientras tanto? (tomo este argumento de mi buen amigo Erik, por cierto quasi artífice del espíritu de este blog).
Mientras tanto (ay) los únicos que llegan a algunos barrios son los dirigentes peronistas, sí los del PJ. Lo hacen de un modo que no nos gusta pero ahí están. ¿Qué hacemos nosotros, los que no queremos el -ese?- PJ? Bien, discutamos.
Y si no, ahí tienen hoy en Clarín a don Roberto Lavagna "de jean" en un barrio "pobre". Mamita...

Anónimo dijo...

Para mi el debate sigue abierto...
Mérito del Escriba haberse parado a pensar desde esta ausencia notoria de discusión sobre la temática "cabecita negra no mide"
Es dificil, desde nuestra condición clasemediera, pensar este tema sin querer apoderarse de él y poder reflexionar sanamente desde nuestro prisma cultural. Pero esta bueno el intento, siempre que nos hagamos cargo desde que identidad cultural hablamos...
Eso sí, discriminación positiva mediante, estaría bueno ligar la discusión con la cuestión política y de clase (ver Torrado, muy buen comentario).
Abrazo
Erik

Mariano T. dijo...

En Estados Unidos, la base del Ku Klux Klan no fue la clase alta, ni siquiera la media, sino los blancos de clase baja y media-baja.
En Mississippi en llamas, el racista (un blanco bruto y pobre) decia: "Si no soy mejor que un negro de mierda, no soy mejor que nadie"
El rico discrimina ( o usa) al pobre. La clase media(cuanto mas baja peor) discrimina al nororcho.

manolo dijo...

Escriba
Volviste a dar en el clavo, hoy por hoy solo existe el clientelismo como red de contención universal.
Para todos –personas-, y para todo –necesidades-.
Lo de la “discriminación positiva por porcentajes” le queda mejor al modelo Mandela, que vos no defendes. Creo. ;-P
Con lo que nos recuerda Marcelo T me surgen preguntas:
¿Tenemos en Argentina el equivalente a la Basura Blanca de USA?
¿Los que escuchan Radio 10 entran dentro de esta categoría?
Un abrazo

manolo dijo...

Escriba
Volvi a releer todo el post después de contestarte y me di cuenta de un problema de semántica.
¿Pobre o miserable, midiendo por linea de pobreza o de subsistencia?
¿El núcleo duro, como lo definimos “racialmente”?
¿Cómo se definen “ellos”?
¿Me equivoco, o Susana Torrado habla de aquellos que estan bajo la linea de subsistencia en las zonas urbanas?
Por ejemplo los Tobas, que migraron a Rosario desde el Chaco en los ultimos 15 años.
Un abrazo

Ana C. dijo...

Pero claro que no existe la "white trash" en Argentina! Esos conceptos norteamericanos, como bien dijo María Esperanza, en Argentina no tienen sentido porque todos somos mestizos.

Además, los immigrantes del Sur de Europa, que fue la mayoría, no eran blancos del todo. La mitad de los españoles y de los italianos está mezclada con árabe.

(Se enteran de esto y me matan).

Anónimo dijo...

Ana
Me refería al comportamiento, no a la genética.
Un importante sector de la audiencia de Blumberg, tiene ese comportamiento.
Mano dura, limpiar la calle de cartoneros y piqueteros, antipolítica, etc.
Se autodefinen como la gente y se consideran modernos y civilizados.
Su mejor caracterización es el tema de León Gieco, que en este momento no recuerdo el titulo.
Un abrazo
manolo

Nicolás Tereschuk (Escriba) dijo...

Mariano, Ana, Manolo:
Me parece bien la discusión, no creo que haya que traspolar categorías, es cierto que la "etnia" no define nada y eso no lo he puesto en discusión.
Estoy hablando de que nos preguntemos si es verdad que somos un país "crisol de razas" y por qué, como dice Torrado, donde vemos pobreza vemos rostros criollos. Nada más. No tengo claro qué hacer con eso pero considero que es un tema importante.
Manolo: la clase media y media baja tiene sus grandes peligros en cualquier lado (como de algún modo marca Mariano). Hay ejemplos históricos por todos lados.
Saludos