miércoles, junio 04, 2014

El momento de Sudamérica para medir




  • "Tenemos que aprender a hablar con el pueblo, para que entienda el momento histórico. El joven que ahora tiene 18 años de edad tenía 6 años cuando gané la primera elección, 14 años cuando dejé de ser presidente. Si él se trata de informar por la televisión, él es un analfabeto político. Si se trata de informar por la prensa escrita, con raras excepciones, también es un analfabeto político. Los medios de comunicación están tratando de mostrar todo lo negativo. Ahora, si tenemos la capacidad de decir que seguramente su padre vivía en un mundo peor que el suyo, y si empezamos a mostrar cómo ocurrió el cambio, estoy seguro de que va a entender que todavía falta mucho, pero que en 12 años se han dado pasos adelante".

  • "¿Qué es malo? La hipocresía. Tenemos un sector medio de la sociedad, fue aplastado entre los logros sociales de la parte más pobre de la población y de los ricos, que ganaron dinero también. La clase media, en varios sectores, ganó proporcionalmente menos. Cada vez que un pobre se eleva un escalón, quien está diez pasos por encima cree haber perdido algunas cosas. Marilena Chauí tiene una tesis que me parece correcta: un sector de la clase media brasileña, a veces también es progresista, desde el punto de vista social, pero no aprendió a socializar los espacios públicos y entonces se incomodó".

  • "Es inaceptable la falta de respeto a Dilma. Si quieren hablar mal, háganlo en el editorial del diario. Pero a la hora de la cobertura del hecho, publíquenlo como es".

  • "El Gobierno no se comunica, se lo dije a Guido Mantega, para que se lo diga a Dilma: viendo cómo está el mundo hoy, cada dos meses el gobierno tiene que hacer igual como una empresa con los fondos de pensión. O sea: usted tiene que hacer viajes y convencer al fondo de que su empresa es rentable y vale la pena invertir. Entonces, cada dos meses el gobierno brasileño tiene que ir a Nueva York, no para hablar con jubilados brasiñelos, sino con el inversor. Ya hablé con Itamaraty, con Bradesco, Santander, todos se disponen a articular los mayores debates brasileños para mostrar al mundo las realizaciones y potencialidades. Petrobras tiene que viajar cada 30 días adonde esté el inversor. No podemos confiar en un periodista inglés que copia el material de un periodista que vive en Rio y busca material en los diarios para inspirarse". 

  • "Con los BRICS, tenemos que tomar decisiones políticas. Somos una especie de péndulo en el planeta Tierra, entonces no podemos estar dependiendo de los dólares para hacer negocios. Tenemos que construir, y no esperar que el mundo construido en el siglo XIX, principios del siglo XX, viene a salvarnos. Podemos hacer la diferencia. Creo que el acuerdo por el negocio del gas entre Rusia y China fue aprobado con guantes de seda en la cara de la Alianza Atlántica. Creo que los BRICS deben trabajar como una especie de garantía para las cinco economías principales. ¿Por qué digo esto? Mercosur, cuando llegué a la presidencia, era inútil. El ALCA era el que estaba en la moda. No hemos implementado el ALCA y el Mercosur ha incrementado de 10.000 millones a 49.000 millones el flujo del comercio exterior. América del Sur no valía nada, y Brasil no conversaba con nadie, nadie conversaba con Brasil."