lunes, agosto 25, 2014

El tiempo es tirano para medir


El domingo me consultaron en Página 12 sobre cómo se para la oposición ante el proyecto de "Pago Soberano", impulsado por el Gobierno nacional. El arte de la síntesis periodística es un deporte de riesgo, lo sabemos. Por tanto, ante la impunidad espacial de un blog, va la respuesta completa:


- Es muy interesante ver cómo se maneja el Gobierno en este tipo de conflictos. Si bien se dice que el Gobierno reduce este tipo de situaciones a un planteo binario, si se quiere "populista" de "nosotros o ellos", esto que se dice de "Patria o Buitres", cuando uno repasa los planteos de Cristina y del ministro de Economía están plagados de información, de argumentos, de planteos ultra-técnicos. Hablan de los tenedores de bonos, de las cláusulas del prospecto de emisión de deuda, de jurisdicción, de las diferencias técnicas entre pago y cobro, ¡de la cláusula Rights Upon Future Offers, de cómo se disparan o no los Credit Default Swaps !!!!! Esto siempre me pareció muy llamativo. No dicen ¡"yankis, fuera"! o retiran a su embajador de Washington. No es exactamente eso, hay una serie de argumentos sobre la negociación con los que se puede estar de acuerdo o no pero ahí están. 

- Por otra parte, a la vez, sería imposible que esta situación -un fallo donde premios nobel, Francia, México, toda América Latina y hasta Estados Unidos dicen o que es una locura o que es peligroso- no desate en distinto sectores, también del oficialismo, una dinámica de "Patria o Buitres". Básicamente porque bien puede ser interpretado como una agresión a la soberanía nacional.

- Un gobierno como el de Cristina, en su año 11 de gestión, sin reelección y con comicios nacionales el año que viene creo que más que en las encuestas está pensando en ocupar el centro de la escena política. Es algo siempre necesario para cualquier gobierno pero más para uno que, está en el período en el que cualquier gobierno se considera como "pato rengo" (último tramo sin reeleccíon). Y el Gobierno siente que pisa sobre un terreno más firme con este tema, más sólido, más "central".

- Cristina se apoya también sobre un tema. Este tipo de conflictos revelan cuáles son las situaciones que debe enfrentar un presidente de tanto en tanto en un país como la Argentina. Son conflictos para nada simples, donde se juegan muchos intereses presiones nacionales e internacionales. Y un gobierno que gobierna hace 11 años -bien, mal, más o menos, lo que sea- se siente más cómodo en esas cuestiones que la oposición. El conflicto también revela "qué se necesita para ser presidente". Me imagino que en el Gobierno consideran que no todos los precandidatos tienen "lo que se necesita para ser presidente".

- El posicionamiento de la oposición vuelve a mostrar la fragmentación de todo ese espectro: Macri en contra, los dirigentes de la UCR en contra pero con otros argumentos, Elisa Carrió abstención, Sergio Massa proyecto alternativo. Y a la vez, una homogeneidad en el FPV: todos los precandidatos a favor. En este sentido, cuando se habla de la crisis de los partidos políticos, la destrucción del sistema de partidos a partir de 2001, etc, habría que pensar si el FPV -con todas sus flaquezas institucionales- no termina posicionándose como "un partido como los de antes" donde hay diferencias sobre distintos temas entre los candidatos pero no sobre un conjunto de temas centrales, una "plataforma".

- En los sistemas presidencialistas sudamericanos, donde -salvo en los casos de Chile y Uruguay- lo que prima es un "bajo nivel de institucionalidad", no son tanto las normas escritas lo que marcan la dinámica política sino otro tipo de acciones, relaciones, etc. En ese contexto, no hay sistemas de partidos bien definidos y lo que prima no es un choque entre partidos (Oficialismo-Oposición) sino directamente Presidente-Oposición. El Presidente suele estar en el centro y la oposición reacciona. En este caso también se da lo mismo. 

- La dispersión opositora en este tema revela también el problema de las oposiciones en Sudamérica: ¿es más efectivo plantear un rechazo liso y llano a las políticas del gobierno? ¿O plantear tambíen algún tipo de "continuidad"? ¿Cuánto de cada una te permite generar una mayoría electoral sólida? Mi amigo el politólogo (Universidad Nacional de San Martín) Mariano Fraschini le llama a esto en algunas notas que ha escrito el dilema de la "caprilización". El líder opositor venezolano Henrique Capriles logra su mejor desempeño electoral cuando en lugar de plantear un rechazo absoluto a las políticas del chavismo, asegura que mantendrá una serie de políticas y se plantea más bien como un "mejoramiento" o "superación" de las políticas vigentes y no como un reformador absoluto. En este caso, Macri piensa que no, que el rechazo es lo que mejor lo posiciona, FAU duda y Massa se pronuncia en el medio, en una estrategia de "caprilización", diría Fraschini.

- Cierta coincidencia entre Macri y la UCR alimenta lo que se viene hablando de un posible acuerdo. Sin embargo, es llamativo como Carrió dice que son "todos tontos" por engancharse con este tema, cuando parecía ser ella la más impulsora del pacto con el PRO.

- Acá también hay apuestas a un mediano plazo sobre los escenarios económicos. Hay precandidatos a los que les conviene un escenario económico "mejor" para 2015 y otros un escenario económico "peor", más turbulento. Y también es así que se posicionan los candidatos. 

- Y hay que tener en cuenta que los candidatos no actúan en el vacío. Tienen apoyos detrás, hay sectores que los apoyan: me imagino que si muestran coincidencias y firman documentos con el Foro de Convergencia Empresarial (la Rural, UIA, AEA, IDEA, etc.) tienen vínculo con sectores a los que este tipo de planteos de Cristina le parecen negativos, no van a salir tampoco a apoyar la inciativa...

3 comentarios:

oti dijo...

Nicolás, estas cosas que le toca enfrentar a CFK no son nuevas en la historia. Son siempre los mismos dilemas, solo cambian las figuritas.

Te transcribo partes de un discurso que dio el Coronel Perón el 7/8/45 en el Colegio Militar.

Cito:

"Hasta ahora la revolución había accionado más bien sobre postulados sociales y económicos; ... en el orden económico ... en primer término ... se ha tratado de la solución de los problemas ... emergentes del estado de guerra del mundo. En segundo término, de encarar la recuperación nacional, es decir, recuperar paulatinamente para el Estado los valores que son del Estado y que deben volver a él. … otro de los postulados económicos era defender las riquezas del país de manera que ninguna de ellas pudiera ser entregada en lo futuro a manos extranjeras". ... En el aspecto social, nuestros postulados eran organizar el trabajo … instituir una previsión social tan amplia como fuere posible. …

“Es natural que contra esta reforma se hayan levantado las fuerzas vivas, que otros llaman los ´vivos de las fuerzas`, expresión más acertada que la primera. ¿En qué consisten estas fuerzas? En la Bolsa de Comercio, quinientos que viven traficando con lo que otros producen; en la Unión Industrial, 12 Sres. que no han sido jamás industriales … Nuestra acción ha conformado un núcleo de reacción contra la revolución, lo cual es natural. Cuando se realizan obras, se crean enemigos; cuando nada se hace, los enemigos desaparecen. Para nosotros, hubiera sido más fácil seguir el camino ya trillado y entregarnos a esas fuerzas que nos hubieran llenado de alabanzas. Entonces, todos los diarios nos aplaudirían, pero los hombres de trabajo estarían en condiciones iguales o peores que antes”. …

“… he sido receptáculo de innumerables sugestiones. Les aseguro a Uds. que si yo me decidiera a entregar el país, mañana sería el hombre más popular en Buenos Aires …me lo han dicho impúdicamente: - Vea, Coronel, ¿por qué no deja de pelear con esos hombres y se arregla? – Me lo han dicho 20 veces. Yo les he preguntado invariablemente: - ¿A qué precio? – Muy simple: arreglando las cuestiones económicas. - ¿Y en qué consisten las cuestiones económicas? – Pero, hombre, llegando a combinar los negocios internacionales, cuestión de transportes, cuestiones de industrias (…) En otras palabras, Sres., entregar el país. Esa es la realidad. Si yo entregara el país, me dijo un señor –en otras palabras, naturalmente, pero que en el fondo decían lo mismo- en una semana sería el hombre más popular en ciertos países extranjeros. Yo le contesté: - A ese precio, prefiero ser el más oscuro y desconocido de los argentinos, porque no quiero –y disculpen la expresión- llegar a ser popular en ninguna parte por haber sido un hijo de puta en mi país. Esa es la cruda realidad que se nos presenta. Podemos solucionar todos los problemas, no tendríamos ningún problema más, pero tendríamos que entregar el país. Pero creo que no hay ningún argentino que pueda colocarse en esa situación. Por eso, luchamos y seguiremos luchando contra el diablo si fuera necesario. Pero el país lo vamos a salvar o nos vamos a hundir con él, pero no lo vamos a entregar”.

oti dijo...

Continuación de la cita anterior (JDP, 7/8/1945, Colegio Militar).

“Esta es la famosa reacción en que verán Uds. que están los hombres que han entregado siempre el país. Están los grandes capitalistas que han hecho los negocios vendiendo al país. Están los abogados que han servido a las empresas extranjeras para escarnecer y vender al país; están algunos Sres. detrás de ciertos embajadores, haciendo causa común con ellos, para combatirnos a nosotros, que somos los que estamos defendiendo al país. Están los diarios pagados, en los que aparecen artículos de fondo, con las mismas palabras enviadas desde una embajada extranjera y frente a una página pagada por la misma embajada. Estos son los diarios que nos combaten. ¡Mucho honor en ser combatidos por esos bandidos y traidores! Esos son los que han organizado la reacción. Afortunadamente, no habían entrado en las FF.AA., pero ya ha entrado ahora y tenemos la contrarevolución en marcha, la que debemos parar, haciendo lo que sea necesario hacer. Esta es una carta que se juega una sola vez en la vida, pero no debemos olvidar que estamos escribiendo la historia de la Nación. Si hemos guerreado durante 20 años para conseguir la independencia política, no debemos ser menos que nuestros antecesores y debemos pelear otros 20 años, si fuera necesario, para obtener la independencia económica. Sin ella, seremos siempre un país semicolonial. … Ni un solo privilegio al extranjero … En eso seremos inflexibles, aunque nos hundamos. Nos hundiremos, pero con el honor de haber defendido el país”.

Nicolás Tereschuk (Escriba) dijo...

Buena Oti.