Justo revisaba la biblioteca, decía.
"...su objetivo principal (el de los gobiernos de Juan Perón) consistió en tratar de mantener salarios reales altos independientemente de su productividad y esto a la larga tampoco era posible. Para hacerlo, el gobierno intervino en aquellos precios que podía controlar: alimentos por medio del tipo de cambio, vivienda con la ley de alquileres, tarifas, combustibles y a veces directamente fijando precios máximos o mínimos (...)".
"Las tarifas, durante los dos períodos de perón de 1946 a 1955 quedaron rezagadas en términos reales un 35% . Esto produjo pérdidas reiteradas a las empresas a que operaron con precios debajo de sus costos por períodos prolongados. Las diferencias fueron cubiertas en parte por créditos subsidiados por el Banco Central. Las pérdidas afectaron también su situación patrimonial y la calidad y eficiencia en la presación de sus servicios. A lo largo de los años no se renovron equipos, ni se cuidó su mantenimiento".
"El racionamiento de energía limitaba el desarrollo de las industrias y del comercio. Los apagones en Buenos Aires, al final de la década peronista, la hicieron parecer a un país en guerra".
ResponderBorrarAhí hay una ideología básica... y eso que siempre se nos acusa de no tenerla. El desarrollismo siempre pensó al trabajo como un factor de la producción, pero el centro era, justamente, la búsqueda del crecimiento y el desarrollo de la empresa, y LUEGO pensamos en el trabajo. El peronimos, en cambio, ve a la industria como puestos de trabajo primero y como unidad productiva después. Ayer y hoy nos topamos con el mismo problema, los mismos límites. El sector privado se resiente al cabo de un tiempo de salarios altos y falta de inversión, y deja de demandar trabajo. Tendremos que robar algún elemento del desarrollismo para resolverlo?
Hola mide /no mide , No se entiende que copies lo de este profe, sin aclarar tu punto, hiciste un cambio de ideología? Por lo menos para publicar este análisis de Cortés Conde, pienso que se debe comparar con otra línea de pensamiento, a menos que creas que él es neutro.
ResponderBorrarlinkedin dice: Profesor
Universidad de San Andres
Actualmente tiene este puesto de trabajo
parte del comentario a su libro publicado x cambridge university:
"lo que es sin duda el capítulo más polémico del libro, que el autor titula «La economía política del peronismo»
Sin embargo, Cortés Conde pone especial atención en los aspectos menos conocidos del período, en particular la política fiscal y de deuda pública, la política monetaria y el financiamiento suministrado a través del Banco Central. En el caso de esta última entidad, que fue manejada desde el gobierno como un instrumento de promoción de determinados objetivos económicos, se demuestra que canalizó un volumen desproporcionado de crédito a los bancos oficiales, Banco de la Nación, Banco de Crédito Industrial y Banco Hipotecario Nacional, lo que permitió impulsar determinadas industrias y numerosas obras públicas y de vivienda popular, pero también restringió opciones para muchas empresas pequeñas y medianas, que sobrevivieron gracias a la expansión del mercado interno, pero siempre con dificultades. A su vez, el Banco Central fue clave en el manejo de nuevas instituciones como el IAPI, agencia estatal que controlaba buena parte del comercio exterior. En resumidas cuentas, Cortés Conde nos describe el surgimiento de un capitalismo estatal que podría describirse como un verdadero Leviatán, fincado en numerosos y grandes bancos y empresas estatales, conviviendo con el capitalismo privado en el campo y en la mayoría de las esferas del comercio y la industria.
PD: lo copiado es una parte
Esetimado:
ResponderBorrarQue Cortés Conde critique tanto al peronismo me dice algo también.
Saludos