Esta semana asistimos al desfonde profesional del diario La Nación con una serie de episodios que no vamos a rememorar acá porque aburre ya. La clarinización del diario con una tapa como la del miércoles, que al mediodía ya había sido desmentida por medio mundo fue sólo una señal. Los "gurkas" parecen haber ganado la interna del diario.Sin elecciones a la vista que pueden dejarlos en offside, no habrá mínimas reglas del periodismo -a las que hasta ahora solía aferrarse el diario- que les impida escribir cualquier "relato".
Más llamativo aún resulta la trayectoria del suplemento económico de los domingos, al que se elogió varias veces en este blog por lo que era su estimulante pluralidad de enfoques.
Hoy se le dedica una nota -nota de tapa del diario- a afirmar que este año la economía va a crecer menos que en 2011, cosa que sabemos desde hace más de un año. ¿O no sabemos desde hace más de un año se que probablemente este sea el año con menor crecimiento desde 2009? Ponele que da hacer una nota de eso. Comienza el periodista:
"El nombre y el estribillo del candombe homenaje que el Centro Cultural Oesterheld de La Plata dedicó al ex presidente Néstor Kirchner es una buena alegoría del divorcio entre relato y realidad, tan propio de esta época. "Nunca menos", se desgañitan cantando músicos, partidarios y murgueros. Mientras los acordes suenan, las cifras de la economía muestran, respecto de años anteriores, cada vez menos recaudación de IVA, menos expectativas de creación de empleo, menos consumo, menos transacciones bancarias, menos ventas de automóviles y motos, menos producción automotriz, menos actividad industrial y menos construcción".
¿Es necesario en un diario serio?
Hay dos columnistas invitados hoy en el suplemento: Martín Redrado y -pudorosamente escondido detrás de un par de páginas de avisos- Eduardo de la Rúa, el abogado primo de Fernando que es amigo de Fernando de Santibañes.
Muy lindo todo.
Deberían estar contentos, era lo que querían, menos, menos, menos. Me parece que se van a llevar un chasco. Esperemos que Cristina se decida por varias cosillas que tiene pendientes. Hay tiempo todavía. Yo tengo cada vez más trabajo. La sensación de peligro fue en el mes de febrero: parecía que se venía un derrumbe.
ResponderBorrarParece que están cavando el fondo del pozo para conseguir caer todavía más fondo... no sabía que tenían esa vocación de losers! Abrazo.
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