Dios no quiere hacerlo todo para no arrebatarnos la libertad de la voluntad y la parte de la gloria que nos corresponde en la empresa. Maquiavelo, N. El Príncipe. Capítulo XXVI
ahi está la diferencia entre una generación y otra. Nosotros podemos juzgar a esos hdp porque nunca se nos ocurrió matarlos. Con la Constitución en la mano y el código penal en la otra: ese el camino.
por lo menos fue prudente: "Comments are closed" es para cagarse de risa.
ResponderBorrarsaludos
Che no sabía que Lueco era tan groso!! Para cuando una película de su vida con Benicio del Toro como protagonista?
ResponderBorrarahi está la diferencia entre una generación y otra. Nosotros podemos juzgar a esos hdp porque nunca se nos ocurrió matarlos. Con la Constitución en la mano y el código penal en la otra: ese el camino.
ResponderBorrarDice "Le perdoné la vida y me perdoné la mía" la segunda afirmación es una mentira, si se hubiese perdonado la vida, no escribiría más.
ResponderBorrarFaltaría la banda sonora de un espaguetti-western de fondo....primer plano de los ojos de sabata/leuco y funde a negro.....¡alucinaaante!
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